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Érase una vez... De marzo



Con la receta de ayer tuve que lanzarme al mercado a comprar las fresas por la mañana y pensando en ello he caído en un detalle: La fresa es una fruta de temporada.

Mi madre es doña ahorrillos e intentó inculcarnos (sin verdadero éxito en todo) su manera de pensar, comprar bien es pagar lo mínimo posible por los mejores sabores. Para ello el mejor truco es elegir los alimentos de temporada, es en ese momento cuando todo tiene el sabor que debe tener porque están en su apogeo y además pagamos menos porque HAY EN EL MERCADO.

Me encantan las cerezas, en diciembre es mi cumpleaños y en una tiendecita "gourmet-pija-de mi barrio" vi unas cerezas gordas, oscurísimas, brillantes, preciosas y SOLO me pedían 24 € por la tarrina.

¡Mi sueldo del mes por una tarrina de cerezas!

Por supuesto no las compré, es muy probable que esas cerezas hayan venido en barco de vetetúasaberdonde, guardadas y mantenidas a temperaturas controladas para que no se pongan feas, lo mismo las han pintado en una escuela de Bellas Artes para que tengan buen color... yo que sé. El caso es que las cerezas del Jerte no son en diciembre.

Tenemos que aprovechar su momento de maduración perfecto. Lo mismo podemos aplicar a verduras, hortalizas y pescados.

Hoy os he preparado una lista de la huerta, otro día os prepararé los pescados. Lo prometo.

De la frutería:
Fresas y fresones                                        
Limones                                                    
Kiwis
Naranjas
Peras de agua
Plátanos
Pomelos

De la verdulería:
Acelgas
Alcachofas
Apio
Calabaza
Calabacín
Cebolla
Cebolletas
Coles de bruselas
Coliflor
Endivias
Espárragos trigueros
Guisantes
Habas
Judías verdes
Lechugas
Lombarda
Pimientos verdes
Puerros
Remolacha
Repollo
Tomates
Zanahoria


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