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Érase una vez... Bizcocho de chocolate.


Érase una vez una princesa cuya Sonrisa Alegre Robaba Almas.

Atrapaba a todo aquél que osaba acercarse a ella y como nuestra Cuentista no estaba avisada sobre el gran peligro que suponía… se acercó y quedó atrapada por el encanto de su sonrisa, la muy ilusa permitió además que se acercaran los miembros de su familia y ahí quedaron enredados también.

Debería haberse dado cuenta de que si separaba las primeras letras de cada palabra se formaba su nombre: SARA.

Un día en el que la Cuentista estaba muy nerviosa, escuchó unas palabras mágicas que intenta aplicar desde entonces cuando nota que el humo de la impaciencia sube desde su estómago:

   - ¿No podrías ser un poco más Sara? Pon un poco de ella en tu vida.

Hay que reconocer que es maravillosamente optimista y alegre, un espíritu volador que sonríe e ilumina a los que tenemos la suerte de estar cerca a menudo. Tanto es así que ha conseguido que nuestra Cuentista asista a sus clases de zumba varias noches a la semana y salga sonriendo después de una hora de romperse la vida bailando hasta las tantas de la noche…

El bizcocho que traigo hoy lo preparó ella para que el mayor de sus hijos, Hugo,  lo llevara al cole. Hugo es el amiguete del hijo de la Cuentista y cuando éste probó el bizcocho llegó a casa hablando de lo buenísimo que estaba y queriendo que yo lo preparara en casa.

A lo largo del último año Sonrisa Roba Almas me ha pasado la receta varias veces y por fin hoy, que es su cumpleaños, he decidido preparar y compartir el bizcocho con todos vosotros. 

Pero tened cuidado… lo delicioso que está y el espíritu que acompaña todo lo que ella toca os puede robar el alma…

Felicidades Sara, gracias por ser.

De la despensa:

3 huevos.
El peso de los huevos en harina.
El peso de los huevos en azúcar.
El peso de los huevos en chocolate en polvo (cacao).
El peso de los huevos en mantequilla.
1/2 sobre de levadura química Royal.

Manos a la obra:
Precalentar el horno a 170º. Calor arriba y abajo.
1. Pesar los huevos para saber qué cantidad del resto de los ingredientes se necesita. Suele rondar los 150 gramos.
2. Batir los huevos con el azúcar.
3. Añadir el cacao y mezclar.
4. Tamizar la harina con la levadura, añadir a la mezcla e integrar todo.
5. Poner la mantequilla en un cazo, calentar y cuando se haya fundido la mitad retirar del fuego para que el resto se derrita con el calor residual. Echar a la mezcla anterior y batir.
6. Echar la mezcla en un molde previamente embadurnado con mantequilla y hornear con ventilador entre 20 y 30 minutos a 170º. Tendréis que pinchar con la punta de un cuchillo o un palillo para comprobar si está horneado, cuando salga limpio... estará terminado.

La cantidad de "masa" no es muy grande por lo que los tiempos de horneado dependerán del molde. Yo elegí uno redondo de 26cm. de diámetro, con 20 minutos fue suficiente.


Y colorín, colorado... ésta receta se ha acabado.


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