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Érase una vez.... Guacamole auténticamente mejicano


Érase una vez un grupo de ilusos amigos que estudiaron juntos la carrera de óptica en Madrid. Con el tiempo unos se fueron a sus ciudades de origen, otros se quedaron trabajando en Madrid y para no perder el contacto, decidieron quedar por lo menos una vez al año, en Semana Santa.

La idea era alquilar una casa rural en algún punto intermedio de España y acudir todos allí. Para organizar las compras, las cenas y las comidas,  crearon las que decidieron llamar “JORNADAS GASTRONÓPTICAS”.

Por parejas, tríos o lo que fuera… cada grupito se encargaba de preparar una de las comidas al completo, comprar los ingredientes necesarios y cocinarlo para los demás.

El primer año fuimos a una casa en Cuenca. 

Noe y David se encargaron de preparar la comida del sábado y eligieron como temática la cocina mexicana y nos prepararon un menú delicioso: guacamole, fajitas de pollo y ternera y unos frijoles. En la actualidad siguen viviendo en Madrid, están casados y tienen un par de bichejos por casa.

El guacamole es un plato misterioso, casi todo el mundo prepara uno diferente y curiosamente TODOS están hechos con la receta auténticamente mejicana, algo muy misterioso, porque los hay absolutamente variados y completamente diferentes.

La Cuentista era una de las que estaban ese fin de semana allí y aunque por aquél entonces no existía el blog (apenas teníamos Internet en las casas), decidió comprar un cuaderno e ir anotando todos las recetas que se hicieron ese año y actualizarla en los años venideros. ¡¡Qué ilusa!!

La receta del AUTÉNTICO GUACAMOLE MEJICANO que hicieron Noe y David  lleva los siguientes ingredientes:

         1 aguacate por persona.
         1 diente de ajo.
         Perejil.
         Cebolla (la mitad de cantidad que de aguacate).
         Tomate (la misma cantidad que utilicemos de cebolla).
         Salsa serrana.
         Aceite.
         Sal.

Muchos años después La Cuentista abrió un blog de cocina y recuperó el cuaderno de las “Jornadas gastronópticas” coincidiendo con Semana Santa, absolutamente involuntario. Lo prometo. 

La Cuentista tiene un amigo viviendo en México: Fernando. Sin duda una de las personas más especiales que han pasado por su vida. Fernando se fue hace un año a México, allí ha encontrado a la mujer de su vida y yo LA AUTÉNTICA RECETA DEL GUACAMOLE MEJICANO, no podría ser de otra forma.

Aprovechando que podía conseguir la receta directamente de allí, La Cuentista se puso en contacto con Fernando y aquí está. El informador de los secretos culinarios del guacamole, envió la receta junto con un comentario explicando algunas cosillas, a saber: El jitomate es lo que en España se conoce como tomate y lo que allí recibe el nombre de tomate es para nosotros el tomate verde.

De la despensa:




Para cuatro personas.

Tres aguacates maduros.
Un jitomate. (aunque a mí me gusta más decir jijomate)
Media cebolla.
Una lima.
Un puñado de cilantro.
Sal.

Manos a la obra:
1. Trocear la carne del aguacate.
2. Trocear el jitomate.
3. Picar la cebolla muy finita.
4. Mezclar todo en un mortero con el mazo (o en un plato con un tenedor) hasta obtener una pasta.
5. Añadir el zumo de la lima, el cilantro muy picado y la sal. Mezclar todo.

Consejo Fernandero: No se utilizan batidoras ni licuadoras porque perderá consistencia, lo ideal es encontrar los trocitos de aguacate, jitomate y cebollita entre la pasta.

Moraleja: Años después nos hemos dado cuenta de que éramos unos ilusos, la vida nos lo ha demostrado.... ¿Quedar todos los años? Los niños, los trabajos, los horarios, las parejas... ¡¡Qué bonito es ser ilusos!! 
Quedamos a matacaballo, cuando podemos, con las toallitas húmedas, los pañuelos, los pañales.... en Telepizza o en una terraza para tomar una cerveza.

Pero lo más importante: SEGUIMOS QUEDANDO.

Y colorín, colorado... ésta receta se ha acabado.

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