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Érase una vez... Txaka.




Érase una vez una Cuentista que se fue a vivir al norte de España…

En lugar de cuento hoy traigo una dedicatoria… a “la Pepa”, cuando escribí esta entrada hacía unas semanas de su cumpleaños, ahora hace varios años, varios meses y unas semanas.

No tengo verguenza... tengo la trastienda del Reino lleno de recetas, cuentas y fotos que llevan años esperando ver la luz.

La última vez que quedamos todos juntos, “la Pepa” regaló a la Cuentista el precioso recipiente con forma de muñeco de la foto. Cuando Marijose vio el cuenco se acordó de nuestra Cuentista y de su reino de cuentos y decidió comprarlo para poder regalárselo cuando volvieran a verse.

Gracias Marijose… Por comprarlo y sobre todo por acordarte de mí.

He decidido estrenarlo con una de las recetas favoritas de tu amigo... lo he rellenado con su picoteo favorito y así y por el poder que me he otorgado en el Reino de “Cuentos de sal y pimienta” os uno el resto de vuestras vidas en este mundo mágico.

La txaka en realidad es la carne de unos cangrejos rusos, extremadamente cara y que se comercializa en lata, pero los ingredientes para preparar txaka fuera de Rusia, lo que viene siendo en la cornisa cantábrica, son los palitos de cangrejo y la mayonesa… 

Sencilla, deliciosa y versátil. Se puede utilizar para picotear utilizando colines como cuchara (sistema a “la Cuentista”), para preparar montaditos en minibaguetes, podéis rellenar tortillas, echad imaginación y preparad vuestros propios pinchos. 

De la despensa:
(Para picotear varios días)

15 langostinos cocidos.
10 palitos de txaka (surimi de cangrejo).
2 latitas de atún.
2 lonchas finas de jamón york.
Mayonesa musa. (Fundamental que sea MUSA)

Manos a la obra:
1. Pelar los langostinos y quitar la tripa.

2. Picar los langostinos, el surimi y el jamón york muy pequeño.

3. Escurrir el aceite del atún y desmigarlo. Añadir a todo lo demás.

4. Mezclar todos los ingredientes en un recipiente con la mayonesa musa y guardar en el frigorífico.

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