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Érase una vez... Espaguetis negros con gulas y langostinos.



Érase una vez una Cuentista que vivía en un precioso Reino, con valles y montañas, bosques de hayas y castaños… pero llevaba una temporada sin sentirse absolutamente feliz.

Nuestra pequeña Cuentista era una gran amante de los cuentos y las leyendas y siempre estaba atenta a las historias que contaban los habitantes del Reino.

Pero llegó el verano, el verano es una época poco propicia para cocinar, meterse en la cocina para preparar platos calientes apetece menos, las vacaciones, las prisas para preparar una “merendera” con un sándwich o una ensalada que se pueda llevar a la playa o a la piscina…

Todo ello hacía que nuestra cuentista no pudiera publicar recetas con cuentos.

Casi todos los cuentos llevan detrás una receta dulce o una receta “preparada al amor del tiempo”  y aunque tenía muchísimos esperando… no son buenos para el calor, o los ingredientes no son de temporada…

Un día al despertar, vio que una de las palomas mensajeras, una muy blanca que se llamaba E-mail, había traído una receta de parte de su Hada buena Seoane.

En realidad, el Hada buena Seoane y la Cuentista no se han visto nunca las caras, se conocieron a través de sus respectivos Reinos blogueros y desde entonces se envían mensajes a través del aire.

La receta es perfecta para esta época del año y para todas las demás, sana y buena para los duendecillos de la casa.

Como nuestra Hada es muy buena, junto con la receta también envió una foto del plato preparado por ella y todos podrán verlo en “Todos escribimos cuentos…”

Nuestra Cuentista volvió a sonreír y a sentirse feliz, podía contar un cuento para todos vosotros. Gracias Hada buena Seoane.

De la despensa (para cuatro personajes):



Espaguetis negros (Spaguetti al Nero di Seppia).
3 paquetes de gulas. Mejor frescas, pero valen congeladas.
300 gr. de langostinos frescos o gambas.
2 dientes de ajo.
Aceite de oliva virgen.
Sal.

Manos a la obra:
1. Quitar las cabezas de los langostinos y pelarlos. Yo además quito la tripa negra con un palillo.
2. Picar el ajo lo más menudo posible.
3. Cocer los nidos de espaguetis el tiempo que marque el paquete en agua con sal, con un chorrito de aceite. No enfriar bajo el grifo.
4. Mientras se cuecen los espaguetis, echar los ajos picados en una sartén con dos o tres cucharadas de aceite y antes de que se dore añadir los langostinos, cuando los langostinos estén a medio hacer (cambian de color y se van poniendo anaranjados), se echan las gulas. Rehogar unos minutos removiendo todo.
5. Mezclar los espaguetis con la mezcla de las gulas y dar unas vueltas para que se mezclen los sabores.

Moraleja: Yo añado una o dos cayenas sin romper con las gulas y las colas de langostino... pero mi Hada no lo echa. A vuestro gusto....

Y colorín, colorado... esta receta se ha acabado.

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