Érase una vez un precioso Reino en el que habitaban seres de todas las clases. Unos eran buenos, otros traviesos, había algún ogro malicioso…pero la mayoría coincidía en algo: Preparaban los platos que la Cuentista del Reino buscaba y cocinaba para ellos. Además, había alguno que se animaba a enviar los resultados de sus logros. Hoy toca ver vuestras ratatouille. Todos habéis coincidido en lo mismo, el olor que llena la cocina mientras se hornean las verduras con el aliño y las hierbas. Para mi absoluto orgullo la habéis preparado de distintas formas. Muchos de vosotros no sabréis que tenemos a nuestra propia Rapunzel entre los habitantes del Reino, Isabel es dueña de una maravillosa y larga melena rizada… no se deja ver mucho porque vive en la vecina aldea de Talebook y normalmente suele encontrarse por allí con nuestra Cuentista. Y allí, en la aldea de Talebook, dejó nuestra Rapunzel particular la fotografía de su ratatouille y sus co...
Érase una vez... Una madre que siempre echaba la cantidad correcta de sal en la comida y contaba cuentos maravillosos a sus hijos por la noche. Al anochecer cuando el padre se iba a trabajar, acostaba a sus dos hijitos con ella, uno a cada lado mientras decía: “¿Queréis que os cuente un cuento de sal y pimiento?” Muchísimos años después me gustaría mezclar esos ingredientes y compartir con vosotros el gusto por la cocina y los cuentos de la vida.